Por el sur y suroeste del término municipal de Cartagena se sitúan las sierras litorales de El Algarrobo, La Muela, Pelayo, Gorda, La Fausilla y Minera, con sus últimas estribaciones en Cabo de Palos e Islas Hormigas. Los materiales geológicos dominantes son diversos: sedimentarios, como caliza y dolomías; y metamórficos, como la pizarra o mármol.

Dependiendo de su exposición (solana o umbría) las sierras soportan comunidades vegetales distintas; siendo predominantes los matorrales.

• En las umbrías aparecen pinares de Pino carrasco (Pinus halepensis), con diferente grado de madurez, que condicionan un sotobosque dominado por especies de sombra. En las umbrías de suelos degradados destacan los aliagares de Calicotome intermedia, especie iberonorteafricana tremendamente competidora y en clara expansión en el litoral cartagenero.
• En las solanas de la mitad oriental de la sierra, sobre litosuelos calizos, está presente la Sabina mora (Tetraclinis articulata) que constituye una formación vegetal exclusiva en el continente europeo de las sierras orientales de Cartagena.

Entre las formaciones arbustivas diferenciamos matorral de cornical (Periploca angustifolia) y matorral de palmito (Chamaerops humilis), propio de laderas más húmedas, acompañado de lentiscos (Pistacia lentiscus) y espinos (Rhamnus lycioides), entre otros. 

En zonas soleadas, aparecen toda una serie de especies heliófilas, entre las que se encuentran numerosos iberonorteafricanismos como Launaea arborescens, además de pequeñas matillas típicas del tomillar cartagenero, con interesantes elementos endémicos como el rabogato (Sideritis marminorensis) o el tomillo de invierno (Thymus hiemalis).

En la sierra litoral se ha podido constatar una importante diversidad de fauna vertebrada, entre la que destacan las aves por el número e importancia de algunas especies en el contexto europeo. Si diferenciamos por distintos ambientes destacan primeramente los roquedos como lugares de anidada de aves rupícolas, entre ellas la chova piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax), collaba negra (Oenanthe leucura) y vencejo real (Apus melba), así como de algunas rapaces rupícolas, como el búho Real (Bubo bubo), halcón peregrino (Falco peregrinus) y águila perdicera (Hieraëtus fasciatus).

En el matorral la composición de la fauna depende del grado de cobertura de la vegetación, destacando por su rareza, el camachuelo trompetero (Bucanetes githagineus). Otras especies comunes son el jilguero (Carduelis carduelis), alcaudón real (Lanius excubitor), curruca tomillera (Sylvia conspicillata), etc. Dentro de las rapaces son características el mochuelo (Athene noctua) y el cernícalo vulgar (Falco tinnunculus).

Al igual que las zonas forestales, las formaciones de matorral suponen el hábitat de mamíferos carnívoros como el zorro (Vulpes vulpes), garduña (Martes foina), tejón (Meles meles) y gato montés (Felis sylvestris).